Glaciares de Chile: conoce y protege los ríos de hielo milenario
Nuestro país cuenta con casi el 80% de los glaciares de Sudamérica, la imponente Cordillera de Los Andes da lugar a la mayoría de ellos, debido a las bajas temperaturas que hay en la altura. Los hay de muchos tamaños y formas, entre paisajes inhóspitos y rodeados de la naturaleza más indómita, conocerlos es, sin duda, una experiencia única. Son además las reservas de agua dulces más importantes del planeta y hoy en día peligran gravemente debido al accionar humano y el cambio climático. Aquí en SUDA te invitamos a conocer mucho más sobre estos "ríos" de hielo milenario.
Los glaciares ocupan cerca de 20 mil kilómetros cuadrados de territorio chileno, se podría decir, que este país es un lugar excepcional para conocerlos y, por supuesto, contribuir a su conservación. Estas imponentes masas de hielo son, en realidad, ríos de agua, que se forman por la persistencia de la nieve caída durante un largo período de tiempo, y que luego se comprime en masas de hielo, formando estas especies de montañas que todos conocemos.
De toda América del Sur, Chile es el país que tiene más glaciares. Concentra 80% de ellos, principalmente en la Patagonia, desde Puerto Montt hacia el sur. El 86% de ellos se encuentra en la zona austral y el resto -más pequeños- existen en las montañas o cerca de las alturas de un volcán.
Para ser clasificado como glaciar, se debe tener una masa de hielo superior a 100 metros cuadrados y una profundidad mayor a 50 metros. Algunos glaciares tienen el tamaño de una cancha de fútbol, y otros llegan a tener la magnitud de ciudades enteras. La supervivencia de un glaciar depende del promedio entre la cantidad de hielo que se derrite y la cantidad de nieve que cae y puede permanecer en el tiempo para lograr densificar en su superficie. El balance de estos dos procesos se denomina “balance de masa glaciar”.
A lo largo de los años, los glaciares sobreviven, prosperan, se funden, se fragmentan y desaparecen, todo como resultado de este balance de masa. Como la mayoría de las cosas en el planeta Tierra, la vida de un glaciar está equilibrada, si el clima local lo está, si las temperaturas son estables y no superan los promedios históricos. En invierno las temperaturas son frías y la nieve cae, y parte del hielo se convierte en hielo glaciar, y llegado el verano, las temperaturas aumentan y la nieve y el hielo del glaciar se derriten, así se repite este ciclo, que es además, parte fundamental del ciclo del agua. Sin embargo, el cambio climático y el aumento de temperaturas a nivel global, ha cambiado este panorama para siempre, y hoy nos arriesgamos a eventos tan extremos como su desaparición.
En 2020 la Dirección General de aguas (DGA) realizó un inventario que estima un total de 24.500 a lo largo del territorio, 0,8% se encuentran en los Andes desérticos, 3,6 en los Andes Centrales, 6,2 en la región de Los Lagos y 8,9% en la Patagonia y Tierra del fuego. Sin embargo, estos estudios e imágenes satelitales no son tan precisos, puesto que son retratos de entre el 2000 y 2003, y es altamente probable que muchos de ellos hayan reducido su tamaño y los más pequeños hasta desaparecido los últimos 20 años.
Por otro lado, el “Inventario de glaciares Randolph”, que es un parámetro en estudio de glaciares a nivel mundial, sugiere que hay 11.151 glaciares en Chile. Este estudio, entre otras cosas, considera varios glaciares como solo uno, lo cual puede ser en parte la razón de estas gran diferencia. Probablemente la cifra exacta de cuántos glaciares hay en Chile está en algún punto entre las dos.
¿Por qué es importante proteger los glaciares?
Los glaciares son parte fundamental del ciclo natural del agua y el balance de energía en el planeta. La pérdida de glaciares alrededor del mundo contribuye al aumento del nivel del mar. De hecho, a partir de su derretimiento, se estima que el promedio del nivel del mar podría subir hasta 20 cm producto del cambio climático. Aunque pueda no parecer mucho, considerando que en el mundo existen millones de personas cuyos medios de vida se encuentran en los niveles actuales del mar, los impactos son severos e incalculables.
Felipe Espinosa Cancino, miembro de Fundación Glaciares Chilenos, destaca la importancia de los glaciares para nuestras vidas. "Los glaciares aportan agua a los caudales de los ríos, de ellos depende su flujo en época estival sobre todo. Realmente son el sustento de agua para muchas ciudades, sobre todo en la zona central, donde llueve menos", comenta.
Efectivamente, los glaciares además proporcionan otros servicios ecosistémicos imprescindibles, como mitigar los efectos del cambio climático. Gracias a ellos también podemos producir energía hidroeléctrica, y proveen recursos hídricos para la minería, lo cual paradójicamente, los tiene actualmente amenazados. Es por eso que urge pensar formas de desarrollo sostenibles y mitigación de impactos, que sean coherentes con su conservación.
¿Has tenido la posibilidad de ver un glaciar? Estas imponentes masas de hielo no dejan indiferente a nadie. Son lugares asombrosos, reservas de agua y vida, rodeados de paisajes sublimes. Por lo general están en lo alto de las montañas o entre los fiordos patagónicos, por lo que acercarse a ellos es una verdadera aventura. Te invitamos a conocer algunos de ellos. Considera siempre el impacto de tu visita, procurando no dejar rastro y hacerlo siempre con guías y profesionales certificados para garantizar la máxima seguridad en tu aventura.
Glaciar La Paloma, Región Metropolitana
Dentro del Santuario de la Naturaleza Yerba Loca, camino a Farellones, entre las cumbres nevadas de la Cordillera de Los Andes se encuentra el Glaciar la Paloma. Rodeado de flora y fauna nativa de los Andes Centrales, tendrás que caminar entre 6 y 8 horas desde la parte baja del parque, en que podrás contemplar y envolverte de toda la belleza de estos paisajes. Te recomendamos hacer esta ruta entre octubre y marzo, para evitar las inclemencias del frío invernal, sobre todo, para pasar la noche.
Glaciar Jorge Montt, Región de Aysén
Ubicado al sur de la caleta Tortel, al extremo norte del Campo de Hielo Sur, es uno de los atractivos más conocidos de la Región de Aysén. La lengua del glaciar mide unos 1,5 kilómetros de ancho y desemboca los canales patagónicos. Dependiendo de la cantidad de hielo flotante y las condiciones climáticas, es posible acercarse a él navegando en kayak, entre hielos de diversa magnitud y toda la belleza de esta gélida naturaleza indómita.
Glaciar Ventisquero Colgante, Región de Aysén
Dentro del Parque Nacional Queulat, desde la carretera austral hacia el sur a 200 kilómetros de Chaitén se encuentra este hermoso glaciar colgando entre las altas cumbres de las montañas llenas de vegetación. De él caen hermosas cascadas originadas del deshielo, que vierten sus aguas en una laguna. Acceder a él es un poco difícil, pues el parque es un lugar aislado, y por lo mismo, poco intervenido y de naturaleza indómita. Podrás disfrutar de un trekking de 1,5 kilómetros, caminando entre fiordos, ríos y bosques siempre verdes, típicos de la Patagonia. Te recomendamos hacer también el hermoso sendero de la Laguna de Témpanos, que se encuentra cerca.
Glaciares en Chile los hay desde Arica a Punta Arenas. Aunque no lo creas, el altiplano y la zona central también dan hogar a estas grandes masas de hielo. Son pequeños tesoros entre las montañas y de ellos depende el caudal de los ríos que alimentan nuestros valles. Te dejamos aquí algunos datos e información interesante para que te motives a visitar alguno ¡No tienes que viajar a la Patagonia necesariamente para conocerlos!
Sin duda, con toda esta lectura te llenarás de ganas aventurarte hacia un glaciar. Sin embargo, es muy importante considerar los impactos positivos y negativos que tienen nuestras viajes a estos lugares, ya que son de los más amenazados del mundo producto del calentamiento global. En SUDA queremos aportar a la conciencia y cuidado de estos paisajes, que son verdaderos tesoros. Debemos conservar y frenar sus amenazas cuanto antes, ya que nuestro bienestar también depende de el de ellos. Te invitamos a potenciar el impacto positivo de tu visita y tomar acción en la defensa de estos ríos de hielo milenario.