En Febrero del año pasado me aventuré a conocer ese mítico país cafetero de centro América con una cultura Maya impresionante, les hablo de Guatemala.
La primera semana, visité algunas ciudades bien turísticas como Flores, el Lago Atitlán, y Lanquín.
Pero fue cuando llegué a Antigua, esa pequeña ciudad colonial ubicada a una hora en dirección al Oeste de ciudad de Guatemala, fue cuando me topé con la ruta de los volcanes del país.
Guatemala cuenta con varios volcanes activos y entre ellos se encuentra el majestuoso Volcán de Fuego, que hizo su última gran erupción apenas hace dos años.
Cuando me enteré de esto, y supe que algunas agencias hacían un trekking a la cumbre del volcán Acatenango, el cual es un volcán inactivo que se encuentra ubicado al lado del Volcán de Fuego, dije inmediatamente “¡Voy!”.
¡Y así partió la travesía!, Éramos alrededor de ocho extranjeros de distintas nacionalidades que llegamos a las faldas del volcán Acatenango, en donde nos recibió nuestro guía Juan, quién estuvo con nosotros dos días.
Partimos subiendo ese día alrededor del mediodía, el paisaje cambio varias veces durante la ruta... a veces seco, a veces muy verde, neblina a rato y de fondo el volcán de Fuego rugiendo cada dos minutos a medida que íbamos alcanzando la cumbre.
Fue un trekking que logramos en 4 horas y media llegar a nuestro lugar de camping de esa noche y luego 2 horas más a la cumbre para ver el atardecer. Fue increíble.
Pero lo más increíble fue la noche... jamás en mi vida pensé que iba a presenciar como un volcán activo escupía lava sin parar durante toda la noche. Estábamos todos observando la llamarada y el contraste de colores vivos con las estrellas de la noche. El ruido fue impactante, ¡muy difícil de describir en palabras! Es un sonido que viene del centro de la tierra, realmente único y hermoso.
Esa noche casi nadie durmió, estábamos todos atentos a las pequeñas erupciones, los colores, el sonido, etc... nos reímos muchísimo, preparamos la comida y luego compartimos uno que otro dato de cómo obtener buenas fotos nocturnas.
Fue por lejos uno de los trekkings más lindos que he podido hacer, el solo hecho de acordarme de cómo fue esta aventura me hacen pensar lo ínfimos que somos en un planeta con una naturaleza tan viva.
Ruta en SUDA: https://suda.io/activity/oQx5Enyrvf